10 preguntas para conversar sobre libros con tus hijos
Para mantener conversaciones con los niños, ya sea de los libros que leen en casa o los del colegio, se tiene que ser algo creativo y plantear preguntas abiertas. Evita cualquier pregunta que tu hijo pueda responder con un Sí/No o una frase muy corta.
¿Qué te ha parecido el libro? Muy chulo.
¿Te ha gustado la historia? Sí, es divertida.
Seguro que has vivido alguno de los ejemplos anteriores intentando hablar con tus hijos sobre el libro que han leído y la conversación ha terminado en 2 segundos. ¡A mi también me ha pasado!
Aquí tienes 10 ejemplos de preguntas abiertas que descubrí en el libro The Read Aloud Revival de Sarah Mackenzie. Verás lo puedes utilizar también como preguntas para cuentos con los más pequeños (siempre adaptado al tema y contenido del cuento).
Tal como comenta la autora, no te preocupes si las respuestas de tu hijo son superficiales, especialmente al inicio. Poco a poco abrirás puertas para crear reflexiones más profundas, discusiones, a que tu hijo analice la historia, los personajes, sus emociones o el punto de vista del autor.
¿Qué preguntar a los niños sobre los libros que han leído?
Pregunta 1. ¿Qué crees que ocurrirá en el siguiente libro? Y si no tiene continuación, ¿cómo te gustaría que continuase?
Pregunta 2. Si fueses el autor, ¿qué cambiarías sobre el protagonista o algún aspecto del libro?
Pregunta 3. ¿En qué se diferencia este libro del anterior del mismo autor? Si ha leído de un autor más de un libro.
Pregunta 4. Si le pudieses hacer una pregunta al autor sobre este libro, ¿cuál sería? ¿Por qué?
Pregunta 5. ¿A qué te ha recordado esta historia? Es importante conectar los libros con su entorno real.
Pregunta 6. Escoge un personaje del libro y un adjetivo. Y ya tienes tu pregunta. ¿Cuál es la cosa más generosa /ambiciosa/ divertida / honesta/ egoísta/ misteriosa / cobarde/ peligrosa/ creativa…que Harry Potter hace en la historia? Esto continuará con una pregunta 6.2. ¿Qué te hace decir eso?
Pregunta 7. ¿Qué es lo que más desea el/la protagonista? ¿Por qué crees que lo ha conseguido (o no)?
Pregunta 8. ¿Debería el/la protagonista haber hecho eso (con un ejemplo sobre algo del libro)? O la misma pregunta sobre el antagonista, personajes secundarios…
Pregunta 9. ¿En qué se diferencia A de B? Esto lo podemos preguntar sobre personajes (dos hermanos, amigos, antagonistas…), las casas de los personajes, lugares de la historia, cosas importantes…
Pregunta 10. ¿Me cuentas algo que no quieres olvidar del libro? Tal vez podéis anotarlo en un cuaderno de lecturas. Nosotros tenemos uno de los libros que leemos en voz alta.
¿Qué te han parecido las 10 preguntas sobre la lectura? Por nuestra experiencia son fáciles de utilizar en casa, pero también para todas aquellas familias que hacéis homeschooling (o profes que se han pasado por aquí buscando ideas).
No todas las conversaciones serán iguales, sobre algunos libros serán más profundas y otras no tanto, ¡no pasa nada! Puede que sobre un libro solo plantees una pregunta. Y nunca dejes pasar las conversaciones que surgen de forma orgánica y entonces aquel día ni necesitarás esta guía con preguntas para lectores.
Recomendación para mantener conversaciones con tus hijos
Selecciona 2 o 3 preguntas del listado como inicio de las conversaciones, que parezcan naturales y valora cuando tu hijo está más abierto a conversar. Tal vez es mientras tú cocinas y él está observando o ayudándote, en la mesa desayunando, caminando hacia el parque, en un trayecto en coche…
25 preguntas más para conversar sobre libros con los hijos: enfoque «Dime»
Y si quieres más ideas de preguntas sobre libros, Aidan Chambers es el autor del enfoque «Dime», seguido por muchos maestros y mediadores de la lectura para fomentar la conversación literaria y crítica.
Te dejamos, siguiendo el enfoque de Chambers, 25 preguntas para conversar sobre libros con los hijos en casa.
Chambers defiende que «aprendemos a hablar bien con gente que ya sabe como hacerlo» y que es tanto «ayudar a los niños a hablar bien» como «a escuchar bien», no vamos a conversar por conversar sino para aprender del otro y, muy importante, aprender a escuchar.
¡Felices conversaciones!